

Cómo educar a los hijos. Crianza positiva y consciente.
Aprendizaje padres
Juegos: Los elfos de navidad
Cómo educar a los hijos con crianza positiva y respetuosa
BOTICARIO
Dario Strava
9/26/20244 min leer
¡El duendecillo travieso que hace magia en tu hogar!
Seguro que alguna vez has oído hablar de Elf on the Shelf… ¡o si no, te lo has perdido, amigo! Imagínate esto: es 1 de diciembre, la Navidad está a la vuelta de la esquina y de repente aparece un pequeño elfo travieso en tu casa, dispuesto a hacer de las suyas durante todo el mes.
Este simpático duende, que viene directamente del Polo Norte, se convierte en parte de la familia, observando a los peques (y a los grandes, ojo) y reportando a Papá Noel sobre su comportamiento. Pero no te equivoques, porque no solo es un espía de Santa, ¡también es un maestro del caos!
Un invitado muy especial: Te cuento, el año pasado adoptamos a nuestro propio duendecillo. Lo bautizamos “Cascabel”, porque desde que llegó no hemos tenido ni un segundo de paz (en el buen sentido, claro). Todas las mañanas, mis hijos se despiertan como si fuera el Día de Reyes, corriendo por toda la casa en busca de dónde se ha escondido esta vez.
Que si colgado del techo, que si metido dentro de un calcetín… un espectáculo, te lo digo. Al principio pensé: “Vale, otro muñeco más que terminará en el fondo del armario,” pero qué va. Cascabel se convirtió en el alma de la casa.
Te imaginas levantarte un día y descubrir que el papel higiénico ha sido desenrollado por todo el pasillo, o que el microondas está envuelto en cinta adhesiva. Lo peor es que no puedes hacer ni un café, porque ahí está el duende, burlándose de ti desde su escondite. No puedes evitar reírte.
Un truco para portarse bien: Ahora bien, lo que más me sorprendió no fueron solo las travesuras (¡que ya es decir!), sino lo efectivo que es el método para que los niños se porten mejor. Cada noche, antes de acostarse, mis hijos le cuentan a Cascabel todo lo bueno que han hecho durante el día, como si fuera su mejor amigo. Y oye, mano de santo: comen más fruta, hacen los deberes sin rechistar… Es como si la magia navideña los hiciera mejores personas. Un día, el pequeño apareció en la cocina rodeado de manzanas, como si estuviera diciendo “¡A comer saludable, chicos!” Desde entonces, no falta la fruta en su dieta. ¿Quién necesita trucos de magia cuando tienes un duende que te echa una mano?
No todo es risas: Pero, ¿sabes qué? No todo es tan bonito y perfecto. A veces, olvidas mover al elfo por la noche, y madre mía, el drama. Los niños se despiertan buscando a Cascabel y… ¡está en el mismo sitio que ayer! Eso sí, he aprendido a salir del apuro: “Ah, es que se quedó dormido también de lo bien que os portasteis ayer, chicos”. Al final, todo tiene solución si usas un poquito de creatividad.
¿Qué consigues tú? Si te decides a adoptar uno de estos duendecillos, no solo traerás diversión a tu casa, sino que también ganarás una herramienta secreta para la disciplina. Los niños no se portan bien por miedo, sino porque quieren sorprender a su pequeño amigo. Además, cada mañana es una aventura. Te juro que ver las caras de mis hijos al descubrir las nuevas travesuras de Cascabel no tiene precio.
Y ya sabes, si te falta un toque de magia en casa durante las fiestas, este pequeño ayudante de Papá Noel puede ser justo lo que necesitas. Eso sí, prepárate para algunas noches de creatividad forzada, porque las ideas para las travesuras no se generan solas… Pero oye, valen la pena.
En conclusión, adoptar a uno de estos elfos es como añadir una chispa de magia a tu vida familiar durante diciembre. No solo será divertido para los niños, sino que te recordará la alegría de la Navidad, incluso para los adultos que a veces olvidamos lo mágica que puede ser esta época. ¡Así que no lo dudes! Haz que diciembre sea un mes lleno de risas, travesuras y buenos recuerdos. 🎄✨
Gracias por leer, y recuerda: ¡El mejor duende es el que trae risas a tu hogar!
Consejos Resumen
Planea las travesuras con antelación: El secreto para que el Elf on the Shelf mantenga la magia es la constancia. Si dejas todo para el último momento, te vas a encontrar sin ideas (créeme, me ha pasado). Dedica un ratito a principios de diciembre para planear las travesuras de cada noche. Haz una lista sencilla con ideas como colgarlo del árbol, meterlo en la caja de cereales o hacerlo aparecer con una carta de Papá Noel. ¡Eso te salvará en más de una ocasión!
Usa el elfo como aliado para hábitos saludables: Aprovecha la presencia del duende para reforzar hábitos positivos en los peques. Si te cuesta que coman bien, haz que el elfo aparezca en la cocina rodeado de frutas o verduras, dándole ejemplo. También puedes utilizarlo para promover el orden, haciendo que aparezca en medio de una pila de juguetes desordenados, como si estuviera “limpiando” junto a ellos. ¡Verás que rápido siguen su ejemplo!
Incluye a los niños en las decisiones del duende: Dales la oportunidad de escribirle al elfo para contarle qué les gustaría que hiciera o dónde les gustaría encontrarlo al día siguiente. Esto no solo les mantendrá emocionados, sino que te dará pistas sobre qué tipo de travesuras están esperando. Además, les ayuda a ser más creativos y a practicar la escritura sin darse cuenta. ¡Todo un combo ganador!
Si quieres más píldoras como esta, te suscribes entrando en dariostrava.com o aquí abajo.
Solo si te suscribes ahora, recibe GRATIS las 7 claves para educar sin estrés y sin culpa
Consulta la política de privacidad aquí
Pon tu correo y te las envío👇


Educa familias sin estrés y sin culpa